Siempre fuiste mi causa perdida,
esa que no pude entender por más que quise…
o quién sabe si fue al revés.

Por quererme me perdonaste
y viceversa.
Porque nunca nos entendimos
ni logramos llegar al mismo punto.

Por eso hoy te devuelvo esa canción,
esos recuerdos
y ojalá pudiera devolverte todo el tiempo
que pasamos juntos
y perdimos.
En ocasiones no es el mismo,
pero sabes que en otras sí.

Te devuelvo tu corazón,
los momentos mal gastados,
la ilusión y las ganas que pusiste en nuestra relación.

También me gustaría devolverte todo lo que me hiciste sentir,
porque eso te pertenece de manera indiscutible.
Quizá de esa manera no tenga que soportar más
soñar contigo y despertarme con taquicardia.

Mírame.
Lo siento.
Adiós.