y el que diga que no, miente.
No eres tú, soy yo…
que ya no quiero tus besos,
que ya no necesito tus palabras,
que ya no quiero que me quieras,
que ya no me conformo con tus visitas puntuales,
que ya no tengo ganas de echarte de menos y he empezado a echarte de más,
que ya no me merezco tus caricias,
que ya no hago planes contigo,
que ya no deseo mirarte,
que ya no me apetece verte,
que ya no quiero nada que venga de ti,
que quiero que esto acabe.
No eres tú, soy yo…
yo que me quiero sin ti,
que me muero por conocerme,
que quiero sentirme sola del resto y acompañada de mi,
que me necesito,
que me echo de menos hasta el último centímetro de piel,
que me hago falta,
que tengo que quererme más,
que tengo que regalarme todo el tiempo que te regalé a ti,
que siento que merezco más que cualquiera,
que deseo mirarme y desearme todo a mi,
que solo debería mirar a través de mis ojos,
que solo debería amar a través de mi piel,
que debería olvidarme de tantos,
que debería pensar solo en mi,
que quiero amarme sin odiarte,
que quiero dejar marchar todo lo malo,
que quiero que esto empiece.
No eres tú, soy y seguiré siendo yo.